Con Ceremonia de despedida, Marcelo Rioseco regresa a una escritura de orden metafísico, la cual sigue el hilo conductor de libros anteriores respecto a temáticas concernientes a la extranjería, donde se produce un desdoblamiento del hablante lírico por su condición de inmigrante radicado en Oklahoma, Estados Unidos. A partir de dicha irradiación surgen libros como La vida doméstica (2016) y Olivia en los suburbios (2020), por citar solo dos de sus últimas entregas. El poema que da inicio al volumen, es una clara muestra de ello y se titula, También son extranjeros. Allí escribe: Para el desterrado no hay patria ni casa / ni forma de regresar. / Se ha caminado / demasiado y todas las ciudades se parecen. Sin embargo, el poeta tiene un lugar en el mundo, y ese lugar es el lenguaje y Rioseco lo utiliza de manera maestra. Su país natal es la metáfora de lo que ya no se puede asir, y a la vez, se desmorona y linda con lo fantasmagórico; características propias de nuestra época. Por lo mismo, su obra es actual y nos podemos leer en ella. En Regresar a la patria, escribe: Regresar a la patria, / arrastrando otro p